¡No viajes a Ámsterdam!: Descubre las ciudades más bonitas de Países Bajos
Si tu visión de Países Bajos se limita a los pintorescos canales y las icónicas casas estrechas de Ámsterdam, prepárate para una revelación. Este pequeño pero fascinante país es un universo de experiencias que va mucho más allá de su famosa capital.
Afortunadamente, explorar estas joyas ocultas es sorprendentemente fácil gracias a la eficiente red ferroviaria neerlandesa, que conecta hasta los rincones más remotos del país. Dada la corta distancia entre sus puntos de interés (¡Países Bajos es solo ligeramente más grande que Extremadura!), incluso los pueblos más encantadores están a una cómoda excursión de un día desde Ámsterdam.
Prepárate para un viaje que te mostrará la verdadera esencia de Países Bajos, lejos de las multitudes y hacia la autenticidad de sus paisajes y ciudades con carácter propio. Aquí te presentamos 18 destinos imprescindibles que te robarán el corazón:
Un Mosaico de Encantos Neerlandeses:
Zaandam: A un corto trayecto en transporte público desde Ámsterdam, esta ciudad te transportará a un lienzo del Siglo de Oro neerlandés con su bucólico paisaje rural y el barrio de Zaanse Schans, un testimonio vivo de su pasado industrial con molinos históricos y casas de madera. En el centro, la arquitectura moderna dialoga con la tradición, como el icónico Inntel Hotel.
Cómo llegar: Tren directo desde Ámsterdam (15 minutos).
Groningen: Aunque el viaje en tren de dos horas y media desde Ámsterdam pueda parecer largo, los paisajes verdes que atraviesa valen la pena. Esta ciudad universitaria del norte combina canales, iglesias monumentales, jardines renacentistas y edificios del siglo XVI con una animada vida nocturna centrada en la plaza Grote Markt.
Cómo llegar: Tren directo desde Ámsterdam Zuid (cada hora) o desde la estación central con transbordo (2-2.5 horas).
Maastricht: La ciudad más meridional de Países Bajos te sorprenderá con su rica historia palpable en catedrales y minas de piedra caliza. Además, la región circundante de Limburgo ofrece colinas verdes y bosques ideales para senderismo y ciclismo, con la ventaja de estar cerca de las fronteras con Bélgica y Alemania.
Cómo llegar: Tren directo desde Ámsterdam (2.5 horas).
Giethoorn: Conocida como la "Venecia de Países Bajos", este pueblo de cuento de hadas con granjas de techos de paja y puentes de madera se explora mejor en bicicleta o en barco por sus tranquilos canales. El Museum Giethoorn ’t Olde Maat Uus ofrece una visión fascinante de su historia.
Cómo llegar: Tren a Zwolle (1 hora desde Ámsterdam) y luego autobús al centro de Giethoorn.
Volendam: Este pintoresco pueblo pesquero enamora con sus coloridas casas de madera y barcos de pesca. Degusta delicias típicas como la anguila ahumada y el arenque encurtido, y considera tomar un ferry a la cercana isla de Marken.
Cómo llegar: Autobús 316 desde la estación central de Ámsterdam (30 minutos).
Kinderdijk: El paisaje bucólico holandés por excelencia, hogar de 19 monumentales molinos del siglo XVIII, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Algunos molinos, como Blokweer y Nederwaard, están abiertos al público como museos.
Cómo llegar: Autobús desde Róterdam (30 minutos).
Alkmaar: Atrae por su tradicional mercado de quesos los viernes por la mañana (de abril a principios de septiembre), pero también ofrece museos interesantes, arquitectura medieval, "hofjes" con preciosos jardines e iglesias ornamentadas.
Cómo llegar: Tren directo desde Ámsterdam (30 minutos).
Haarlem: Con sus calles empedradas, canales encantadores y cercanía a Ámsterdam, Haarlem se siente como una versión menos concurrida de la capital. Sus museos, como el Frans Hals Museum, rivalizan con los de Ámsterdam. También cuenta con iglesias históricas, plazas de mercado y una costa tranquila.
Cómo llegar: Tren directo desde Ámsterdam (15 minutos).
Parque Nacional Hoge Veluwe: Uno de los parques nacionales más grandes del país, con una fauna única, edificios icónicos y el museo Kröller-Müller, que alberga una importante colección de arte de los siglos XIX y XX y la mayor colección privada de Van Goghs. El servicio gratuito de bicicletas facilita la exploración.
Cómo llegar: Tren directo desde Ámsterdam a Apeldoorn (menos de 1 hora) y luego autobús a diferentes puntos del parque.
Islas Wadden: Cinco islas que ofrecen tranquilidad costera, dunas, focas y pueblos pintorescos. Texel, Schiermonnikoog y Vlieland (con su festival Into The Great Wide Open en septiembre) son algunas de las joyas de este archipiélago.
Cómo llegar: Ferris desde varios puntos de la costa, como Den Helder (con conexión directa desde Ámsterdam).
Lisse: El corazón de los campos de tulipanes, especialmente los jardines de Keukenhof (abiertos de marzo a mayo) y sus alrededores. A mediados de abril, no te pierdas el Bloemencorso Bollenstreek, un desfile de carrozas adornadas con flores.
Cómo llegar: Autobús Keukenhof Express desde varios puntos de Ámsterdam, incluido el aeropuerto de Schiphol (30 minutos).
Delft: Famosa por su cerámica blanca y azul, Delft también presume de arquitectura renacentista y el museo Vermeer Centrum, dedicado al célebre pintor nacido y fallecido en esta encantadora ciudad con un casco antiguo ideal para pasear y disfrutar de cafés junto a los canales.
Cómo llegar: Tren directo desde Ámsterdam (1 hora).
Eindhoven: Para los amantes de la tecnología y el diseño, esta ciudad del sur alberga museos y academias vanguardistas, como el Van Abbemuseum y Strijp-S (un centro cultural en un antiguo parque industrial). La Dutch Design Week en octubre es el mejor momento para visitarla.
Cómo llegar: Tren directo desde Ámsterdam (menos de 1.5 horas).
Utrecht: Sus históricas bodegas a orillas de los canales, transformadas en espacios para disfrutar junto al agua, son únicas. Es una de las ciudades más ciclables del mundo, ideal para explorar sus encantadoras casas y acogedoras cafeterías. No te pierdas la Domtoren y el Centraal Museum.
Cómo llegar: Tren directo desde Ámsterdam (25 minutos).
Pólder de Beemster: Un ejemplo excepcional de pólder, declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO. Este paisaje llano y verde surcado por canales y molinos es una excursión pintoresca desde Ámsterdam. Visita el encantador pueblo de Middenbeemster.
Cómo llegar: Autobús desde varios lugares cercanos a Ámsterdam (30 minutos).
Róterdam: La segunda ciudad más grande del país, reconstruida tras la Segunda Guerra Mundial como un escaparate de la arquitectura moderna e innovadora. Admira la torre De Rotterdam, las casas cúbicas, el Markthal y el Depot Boijmans Van Beuningen.
Cómo llegar: Tren directo desde Ámsterdam (45 minutos).
Thorn: En la provincia de Limburgo, cerca de la frontera belga, este pintoresco pueblo destaca por sus fachadas encaladas, una rareza en Países Bajos con una historia fascinante ligada a la evasión de impuestos medieval. Explora la abadía del siglo X y el museo de Thorn.
Cómo llegar: Tren a Weert (2 horas desde Ámsterdam) y luego autobús a Thorn.
La Haya: Aunque Ámsterdam sea la capital, La Haya alberga la sede del gobierno neerlandés. Su centro gótico, el Binnenhof, está rodeado de excelentes museos, como el Mauritshuis (con "La joven de la perla") y uno dedicado a Escher. Sus extensas playas son otro gran atractivo.
Cómo llegar: Tren directo desde Ámsterdam (50 minutos).
El creciente problema del turismo masivo en ciudades europeas como Ámsterdam, Venecia y Barcelona, y cómo algunas están implementando o aumentando las tasas turísticas para mitigar su impacto y generar ingresos para mejorar la calidad de vida de los residentes locales.
En el caso específico de Ámsterdam, se aplica una de las tasas turísticas más altas de Europa (12.5% sobre la tarifa nocturna), con la expectativa de recaudar 240 millones de euros en 2024. Si bien el objetivo declarado es combatir los efectos negativos del turismo excesivo y financiar mejoras en la ciudad, algunos expertos señalan que la efectividad de estas tasas para reducir el número de visitantes es cuestionable, y que el enfoque parece haber cambiado hacia la recaudación de fondos. Existe la preocupación de que el aumento de las tasas pueda simplemente desplazar a los turistas a ciudades vecinas, sin disminuir la presión general sobre la región.
Países Bajos es un destino con una riqueza que va mucho más allá de los clichés de Ámsterdam. Su excelente infraestructura de transporte invita a explorar pueblos encantadores, paisajes idílicos y ciudades con una identidad propia interesante. Al planificar tu viaje, no te limites a la capital; aventúrate a descubrir los tesoros ocultos que este fascinante país tiene para ofrecer.